San Juan Xar, un lugar para visitar en familia
Llega el fin de semana y si aún no sabes que ver en Navarra, os traemos la mejor solución que podrás realizar en compañía de tu familia. Se trata de San Juan Xar, un espacio natural en el que desconectaras del mundo habitual y conectarás con la magia de la naturaleza. Este paraje natural se encuentra ubicado en la comunidad autónoma de Navarra, y tiene mucho por ofrecernos. A continuación, te hablaremos un poco acerca de su historia, creencias y su recorrido.
San Juan Xar, una auténtica joya de la naturaleza
Este paraje fue declarado como reserva natural por el Gobierno de Navarra en el año 1987. El motivo por el cual se declaró así es que en él encontramos el único bosque autóctono de Carpe de todo el territorio que comprende la península Ibérica. Los Carpes son una especie de árbol de gran porte, se les conoce también como abedulillos. Durante la realización del recorrido se distinguirán fácilmente por su tronco liso y ramificado, además de sus hojas alternas y con un margen dentado.
Pero aparte de su rareza botánica, San Juan Xar es reconocido por ser un santuario, lo que le convierte en un espacio sagrado y misterioso con muchas historias. Se comenta que en el centro se encuentra una fuente milagrosa, lo que le convierte asimismo en una ermita. A lo largo del recorrido, te acompañará en todo momento el sonido del correr de la fuente curativa, la cual se acompaña con el paso del rio Bidasoa.
Encontrarás una imponente escultura abierta al público
Ahora hablaremos de su fuente milagrosa, se encuentra ubicada cerca de la carretera, pero si la juntamos con su vegetación parece que nos encontramos en un lugar perdido. Este paraje trata de un umbroso bosque, que según se comenta parece un hogar de lamias, estas últimas mencionadas son las ninfas de las aguas según la mitología vasca. A unos cuantos metros del río se observa unos caños de los cuales sale agua de reconfortante sabor y muy fresca.
En base a su historia se comenta que estas poseen propiedades curativas. En la actualidad son muchas las personas que se acercan al agua con la fe de poder ser aliviados de sus dolores. Por lo anterior mencionado es normal encontrar alrededor muchos pañuelos y/o paños colgados junto a la fuente. El agua que compone esta fuente desemboca a pocos metros en el río cercano cuyo nombre es Latza. Posteriormente se difunde en las aguas del Bidasoa.
San Juan Xar y su manantial curativo
La tradición de su ritual de curación comenta que tienes que hacer los siguientes pasos. Primero deberás beber de todos los chorros que brotan de la fuente; posteriormente tienes que mojar un paño y frotarlo en las partes que sientes dolores o que requieren de curación. Seguidamente tendrás que dejar el paño con el cual te frotaste colgado en una de las ramas que se encuentran alrededor de la fuente.
Para completar este ritual debes de subir al santuario que se encuentra ubicado justo arriba de la fuente, y tienes que ponerle una vela a la escultura de San Juan. Actualmente muchas personas acuden a este paraje no solo a disfrutar de su impresionante naturaleza, sino que también recurren a este lugar por la fama de la que dispone en cuento a sus poderes curativos. Ducha tradición procede de una creencia pagana de la lejana prehistoria.
Un lugar mágico
Así que, si aún no te has decidido en cuanto a que ver en Navarra, te invitamos a este precioso lugar. San Juan Xar es un rincón mágico que tienes que visitar en algún momento de tu vida, no esperes más, ¡Anímate!
Sangüesa, una ciudad que tiene muchas historias por contar
Si se ha acabado el puente de diciembre y aún sigues pensando que ver en Navarra, te hemos encontrado la mejor solución. En este post te hablaremos de un mágico pueblo llamado Sangüesa; ubicado en la comunidad autónoma de Navarra, que te ofrecerá una experiencia inolvidable, plagada de historia. Además, es una de las paradas que más emplean los peregrinos que cruzan el Pirineo, hacia el camino de Santiago de Compostela.
Sangüesa y su herencia arquitectónica
Esta ciudad cuenta con un origen remoto, pues en su área geográfica se han encontrado elementos arqueológicos que según múltiples estudios tienen procedencia de la edad de bronce. También, es importante resaltar que gracias a la ubicación en la que se encuentra, esta población fue un epicentro estratégico para controlar la situación fronteriza en el reino de Pamplona. Su colocación le permitía ser un baluarte defensivo contra los ataques de los musulmanes hacia el año 1090.
A lo largo de la historia, esta ciudad fue víctima de las disputas que se realizaban entre los navarros y los aragoneses, por lo que su gente en ese momento diseño unas grandes y solidas murallas; de las cuales en la actualidad aún se conservan algunos restos. Con el transcurso del tiempo, es precisamente en el siglo XII donde Sangüesa se convierte en una localidad de paso importante para los peregrinos que se dirigían hacia el Camino de Santiago.
Su clásico puente de hierro y la majestuosa iglesia
Durante el transcurso del siglo XII se construyeron en la localidad numerosos barrios y parroquias; lastimosamente en la actualidad poco queda de ellos por culpa de una orden de derribamiento puesta por el cardenal Cisneros. Posteriormente esta población es afectada por la Guerra de Sucesión en los comienzos del siglo XVIII, por lo que fue arrasada y sitiada. Además, también fue un escenario de guerra de la independencia contra los franceses y de las Guerras Carlistas.
A Sangüesa le atraviesa el Camino de Santiago desde hace unos siglos, lo cual le ha otorgado aspectos muy positivos en cuanto a su historia y la herencia arquitectónica de la que está goza en la actualidad. Uno de sus principales destinos turísticos es su iglesia románica llamada “Santa María la Real”, esta fue obsequiada a esta localidad en el año 1131 por Alfonso I bajo la orden de Juan de Jerusalén.
Su iglesia declarada monumento nacional en 1889
El antiguo puente que atraviesa el rio Aragón y da paso a esa postal icónica que referencia a la población de Sangüesa, fue construido en el siglo XI por el rey Sancho Ramírez, y fue reformado en el año 1892. En uno de sus pilares contiene una lápida con una famosa frase romana “Cornelia sibi et cornel” que significa El convento de San Francisco de Asís. Dicha creación se le atribuye mismísimo San Francisco de Asís cuando realizo su paso por Navarra en su peregrinar hacia la tumba del apóstol Santiago.
Sangüesa, una población diferente a las demás
Con respecto a Sangüesa se comenta que contiene un monumento en cada una de sus calles, los cuales están declarados como Bien de Interés Cultural. Además, podrás conocer el palacio de Ongay Vallesantoro, es un edificio creado en el siglo XVII, diseñado con un estilo barroco. En su fachada capta mucho la atención su alero, puesto que es uno de los más espectaculares de toda Navarra. Este contiene trece canes que representan animales fantásticos atrapando cabezas humanas, flora, fondos indios, figuras grotescas y frutas exóticas.
Así que si aún no sabes que ver en Navarra el resto de Navidades o aún no has decidido tu próximo destino te recomendamos esta increíble población, un lugar mágico que quiere contarte sus historias. ¡Anímate a conocer Sangüesa!
Selva de Irati, donde el bosque es el rey
Hoy en uno de los lugares que ver en Navarra os traemos uno de los más conocidos de toda la comunidad, tal vez el que más. Hablamos, por supuesto, de la Selva de Irati, cuya fama solo puede ser superada por las fiestas de San Fermín. Si el cuerpo te pide darte un gigantesco baño de naturaleza, el sonido de los bosques y activar tu cuerpo lo que estás buscando sin ninguna duda es llegar a la Selva de Irati.
¿Qué nos ofrece la Selva de Irati?
Pues ni más ni menos que el segundo hayedo más grande de todo el continente europeo junto a la selva negra en Alemania. La Selva de Irati cuenta con más de 17.000 hectáreas de un bosque prácticamente virgen en el pirineo navarro. Cuenta con tres reservas naturales: la reserva de Mendilatz, la de Truistibartea y la reserva integral de Lizardoia. Vete preparando tu cámara de fotos y cálzate las botas de monte porque estás a punto de descubrir un lugar que ofrece muchísimas posibilidades. Te están esperando bosques de hayas y abetos, ríos, cascadas, regatas, cuevas, puentes colgantes o miradores.
Estamos ante un paraíso natural de naturaleza única, enclavado entre los valles navarros de Aezkoa y Salazar. Un lugar ideal para pasar unos días diferentes en contacto con el medio ambiente. Paseos a caballo, descenso de cañones, rutas de senderismo y btt con diferentes niveles de dificultad o tranquilos paseos en canoa por las cristalinas aguas del río Irati te aguardan.
Qué hacer y ver en la Selva de Irati
Las posibilidades que nos ofrece este fantástico lugar son muy numerosas. Deberemos dedicarle al menos un día completo para poder apreciar con el detalle que se merece cada una de las maravillas que contiene en su interior. Podrás disfrutar de las distintas especies animales del lugar, la cual campan a sus anchas en las inmensidades de este Parque Natural Protegido.
Dispone de rutas a medida para cada visitante: mayores, adultos, niños, deportistas… y todos ellos adecuadamente señalizados. El río Irati y el embalse de Irabia dotan al lugar de un escenario de película. Puedes bañarte en él o sencillamente contemplar todo su esplendor y la fauna del lugar, con sus especies de anfibios asomando en las orillas.
Pero Irati cuenta no sólo con una gran riqueza ambiental, sino también arqueológica y cultural. Podemos citar por ejemplo las Casas de Irati, conocidas también como las Casas del Rey, a unos 100 metros de la Ermita de Nuestra Señora de Las Nieves, así como la estación megalítica de Azpegui o la torre romana de Urkulu.
¿Cúando visitarla?
Cualquier época del año es adecuada para venir a la Selva de Irati. Ahora que estamos en los últimso coletazos del otoño podrás disfrutar de una explosión de color donde todo el bosque se ve transformado en una singular paleta de colores. Si vienes un poco más adelante, en invierno, tendrás la oportunidad de realizar paseos en esquí de fondo o raquetas de nieve en la estación de esquí de fondo de Abodi. Por el contrario, en primavera te permitirá gozar de los hayedos de Irati en su máxima expresión, donde las hojas de los hayedos se vuelven de un verde fosforito sin igual. Por último, en verano será la época ideal para acercanos a la orilla del río Irati y refrescarnos
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¿Cómo llegar a la Selva de Irati?
Existen dos accesos destacados que dan entran a la Selva de Irati: Ochagavía en el Valle de Salazar y Orbaitzeta en el Valle de Aezkoa. Se tratta de dos localidades enclavadas a poco más de 1 hora en coche desde Pamplona. Para llegar a Orbaitzeta desde la capital navarra debemos coher la autovía del pirineo A21 para lllegar así a Aoiz o la Na 150. Una vez estemos en Aoiz tendremos que continuar por la NA 172 y la NA 2040 para llegar a Arive.
Por otro lado, para llegar a Ochagavía desde Pamplona cogeremos la autovía del pirineo A21 y en aproximadamente 25 minutos deberemos coger la salida 35 dirección Lumbier. Desde Lumbier continuamos por la Na 178 hasta Ezcaroz y después la Na 140 para llegar a Ochagavía.
Como has podido comprobar, las posibilidades que te ofrece la Selva de Irati son tan grandes como sus bosques. Siendo quizás el lugar más famoso de Navarra…no busques más excusas y acércate a disfrutar de su incomparable belleza.
Burgui, el Pueblo de los Oficios
Si estás de puente y aún no sabes qué ver en Navarra, te invitamos a visitar el pueblo de Burgui, conocido como el Pueblo de los Oficios. Estamos ante una localidad enclabada en el Valle del Roncal, repleta de atractivos naturales y espíritu propio. Sigue leyendo y descubre este pequeño pueblo que apenas alcanza los 200 habitantes.
Un poco de historia
Burgui perteneció en su día al patrimonio de los entonces reyes de Pamplona, para pasar más adelante a los de Navarra. Los datos históricos de mayor antigüedad nos llevan a la época medieval. En aquellos tiempos, esta localidad fue un lugar estratégico situado entre los reinos navarro y aragonés, donde ejercía una función de vital importancia en la defensa del Valle del Roncal.
También contaba con un importante castillo defensivo, utilizado para dicha defensa del Valle. Este castillo estuvo en servicio hasta comienzos del siglo XVI, cuando estuvo a punto de desaparecer tras sufrir uno de los episodios mas crueles de la guerra de Navarra, durante los años 1512-1521.
En la actualidad apenas quedan restos y en su lugar podemos encontrar la ermita de Nuestra Señora del Castillo. También podemos apreciar el carácter fronterizo y militar de Burgui en el maravilloso puente medieval que se alza sobre las aguas dela río Esca.
Burgui, el Pueblo de los Oficios
Todos sabemos que en la actualidad lllevamos un ritmo de vida frenético, con grandes avances tecnológicos que se sitúan como protagonistas de nuestra vida en el día a día. Aquí es donde Burgui recuerda al visitante nuestro pasado a través de una senda. Dicha senda, conocida como la senda de los oficios, es un sencillo recorrido circular de 4 kilómetros donde conoceremos diferentes elementos que eran parte de nuestra vida de antaño.
Su itinerario tiene diversos protagonistas, como el puente medieval donde se ve representado el oficio de cantero, una carbonera, una almadía tamaño natural, una calera, una nevera medieval o un aserradero antiguo.
Su carbonera y horno de pan están guarecidos por una cubierta de madera a cuatro aguas una característica teja. El techado también sirve como un homenaje al centenario trabajo de tejero. Por otro lado. la carbonera está situada de tal forma que nos permite apreciar la chimenea interior. Además de todo ello, la recubren ramas y tierra tal y como ordeban los cánones antiguos.
En cuanto a la nevera medieval o nivera realmente es un pozo subterráneo donde la nieve podia mantenerse limpia hasta la llegada del verano. Su estructura nos hace recordar a las pallozas celtas y resulta muy singular.
Y en cuanto a la calera, es un horno de piedra caliza con forma de cúpula donde se producía cal para embellecer las fachadas de las casas.
¿Qué ver en Burgui?
Tenemos principalmente 4 lugares reseñables que ver en este bello pueblo navarro, los cuales detallamos a continuación:
El puente romano: Gracias a su peculiar estructura postal este puente es la mayor seña de identididad del pueblo. Mide 55 metros y estado de conservación es muy bueno. Aún conserva el viejo peralte, así como sus cuatro arcos de medio punto originales y los tamajares, que a día de hpy siguen bañando las aguas del río Esca. A poca distancia cuenta también con una pequeña presa, desde la cual descendían las almadías. Las almadías son unas balsas construidas con troncos de madera que se utilizaban para trasladar los propios troncos por el río, desde los bosques donde se realizaba la explotación maderera hasta llegar a los puntos de carga para su transporte.
La senda de los oficios: Ya mencionada anteriormente, es un parada obligatoria para los visitantes donde pueden ver como se vivían antiguamente. Ademas cuenta con varias paradas con diversos elementos etnográficos que se han recuperado para preservar el sello de identidad de Burgui.
La Foz de Burgui: Esta foz se encuentra a caballo entre las localidades de Burgui y Salvatierra de Esca (Zaragoza). Estamos ante un profundo cañón esculpido por el río Esca. La Foz de Burgui es la salida natural del valle del Roncal hacia el río Aragón. Está declarada como Reserva Natural y posee con las mayores colonias de buitres de toda Europa, amén de otras especies como el águila real, el alimoche y el quebrantahuesos.
El caserío de Burgui: Situado en posición escalonada en la parte derecha del río Esca- Sus empedradas calles son su principal seña de identidad, así como sus casonas de teja curva y tejados muy apuntados con aleros saledizos y chimeneas cilíndricas con corte pirenaico.
Si sigues pensando qué ver este puente en Navarra no lo dudes más y pásate por el maraviloso pueblo de Burgui. Sin duda será una gran elección para este puente o para el fin de semana,
Adéntrate en las increíbles Cuevas de Urdax
Si te estás preguntando que ver en Navarra, pues tranquilo porque aquí está la respuesta. Las Cuevas de Urdax se convierten en un lugar exótico a la par que precioso para realizar una visita con toda la familia (si es ese tu caso).
Conoce las Cuevas de Urdax “a fondo”
Las Cuevas de Urdax o Cuevas de Ikarbunu como también se las conoce, están ubicadas en la Navarra cantábrica, sumergida dentro del corazón de los Pirineos. Éstas están en formación a causa de la erosión producida por el río Urtxume. Todo esto desde hace ya unos cientos de miles de años.
Estas cuevas por tanto son parte de las grutas de Urdax. Consideradas como yacimiento prehistórico de la época del Paleolítico en su edad más avanzada, siendo este el más importante de todo Navarra.
La Historia de las Cuevas de Urdax
Los montes de la localidad de Urdax ya erán habitados hace ya unos 20.000 años, por lo que el ser humano buscaba refugiarse en las grutas que se encontraban allí. De esta forma se resguardaban así de viento, frío, lluvias y nevadas.
Recordar que estamos en el Paleolítico. por tanto en esta época no se conocía el metal. Esto hacía que la piedra era el material que se utilizaba para la fabricación tanto de armas como de utensilios domésticos. Este hecho ha provocado en que tras varias investigaciones realizadas en las Cuevas de Urdax se hayan encontrado diferentes herramientas de estas características. Desde buriles y agujas de huesos (sílex) hasta el punto de enterramientos humanos.
Todo ello prueba la vida del hombre del Paleolítico sobre estas cuevas, lo que lo convierte en una atracción turística de lo más interesante.
Pero eso no es todo. En el año 1808 se utilizaron como refugio durante los años de la Guerra de Independencia contra la Francia de los Bonaparte. En el año 1965 fue cuando se comenzó a dar un uso turístico de las mismas. Hoy en día las cuevas pertenecen al Ayuntamiento, lo que ha permitido que gracias a una serie de mejoras realizadas en las cuevas, goce de unas instalaciones idóneas para las visitas de todo tipo de públicos.
Realiza una visita guiada
Si te está gustando y resultando interesante todo lo mencionado hasta ahora, seguro que la opción de realizar una visita guiada por las Cuevas de Urdax es la mejor para ti. Para realizar estas visitas se deberá de hacer una reserva con anterioridad y un pago (tarifas más adelante).
Estas visitas tienen una duración de aproximadamente unos 40 minutos, en ella podremos apreciar la gran diversidad de formaciones geológicas (estalactitas, estalagmitas, etc). La temperatura al encontrarnos en una cueva es constante, esta ronda entre los 14 y 16 grados (por lo que es recomendable utilizar ropa abrigada y un buen calzado que agarre ya que en el interior de la cueva hay bastante humedad). También podremos disfrutar de los efectos tanto de luz como de sonido con los que han sido adaptadas los interiores de las cuevas.
Estas guías se realizan en tres posibles idiomas distintos: Castellano, Euskera y Francés. No se permite hacer fotografías con flash (para una mejor conservación). No se puede comer en el interior de las cuevas, ni está permitida la entrada de animales.
Estas son sus tarifas:
- Entrada de adulto: (a partir de los 15 años): 6€.
- Entrada niño (de los 4 a los 14 años): 3€.
- Menores de 4 años, entrada gratuita.
- También hay precios especiales para grupos superiores a las 20 personas.
- Para comprar las entradas de forma online pinche aquí.
Visitar estas cuevas se convierte en un plan perfecto y destino de los demás algo más aventurero y que sale de la rutina. Así que no olvides visitar las Cuevas de Urdax.
Si te gustan las cuevas otra opción si te encuentras en Navarra son las Cuevas de Mendukilo sobre las que ya hablamos en otro post, pincha aquí.
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